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Foto del escritorLina María Arévalo Angarita

Lluvia de sobres: ¿acertada o inapropiada?

Muchos son los detalles que debemos resolver al momento de organizar una celebración de matrimonio, bautizo, primera comunión o cumpleaños, pero uno que no debe ocuparnos demasiado es de qué manera se van a pedir los regalos para el o los homenajeados.

En dichas ocasiones se reúnen en torno a una, o varias personas, todos aquellos familiares, amigos y compañeros que comparten el sentimiento de alegría por el motivo que los convoca. Sin embargo, muchos pierden el entusiasmo de asistir por ese detalle en la tarjeta que marca “lluvia de sobres”, pues esto supone que tendría que disponerse de una cantidad considerable de dinero que, quizá, no se tiene para el momento de la celebración; además, está anotación connota que debería potarse una traje formal o que será una fiesta suntuosa, por lo que puede que algunos de los invitados se sientan incómodos o intimidados y decidan declinar la invitación.



Según la etiqueta, la “lluvia de sobres” aplica solo para los matrimonios, pero no para todos: únicamente podrán usar esta modalidad de regalo aquellas parejas que celebran su boda en una ciudad distinta a la que vivirán, pues el traslado de los regalos puede generar gastos que no todos pueden asumir.


Ahora, una vez aceptamos dicha invitación, surge la pregunta ¿cuánto dinero debe ir en el sobre?, el cálculo debe hacerse teniendo en cuenta cuánto puede costar el puesto (se refiere al menaje, comida y bebida) por cada persona invitada; es decir, si la invitación fue para dos personas y cada puesto, según la ciudad o el estilo del matrimonio, puede estar en promedio en $50.000 COP, el sobre deberá tener mínimo $100.000 COP. Lo ideal sería que ese dinero los nuevos esposos lo destinaran a la compra de cosas de casa o el viaje de luna de miel y no para pagar la fiesta que ofrecieron.


No es válido pedir dinero porque hay ciertas cosas que los novios quieren comprar, pues cada pareja debe tener ya pensado cómo adquirirá lo que necesita para su nueva vida y esto no podrá ser contando con el bolsillo de los invitados.


Ya lo sabes, en bautizos, baby shower, cumpleaños, primeras comuniones o grados, no debe pedirse lluvia de sobres, deja que tus invitados te den un obsequio según sus posibilidades, seguro que lo harán pensando en ti con todo el cariño.

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